Cómo se financian los dueños de Bello
Hace más de 20 años, cuando Óscar Suárez Mira fue elegido alcalde, comenzó la hegemonía de tres hermanos que se han turnado la alcaldía de Bello en distintos momentos. Primero fue Óscar, la cabeza del clan, en 1995; después Olga, entre 2004 y 2007, y ahora está César, en el periodo que comenzó en 2016 y termina el próximo año.
En los periodos intermedios entre un Suárez Mira y otro, sin embargo, han puesto testaferros políticos que les han permitido continuar su hegemonía, mientras ellos ingresan a otros escenarios de poder.
La familia
Tras su paso por la Alcaldía, Óscar se preparó para entrar en el Congreso y consiguió una curul en la Cámara de Representantes por Antioquia en el periodo 2002-2006. Para el cuatrienio siguiente se volvió a presentar a las elecciones legislativas, esta vez para el Senado, y salió elegido. Sin embargo, tuvo que renunciar a su curul para atender la investigación en su contra por presuntos nexos con grupos paramilitares.
En 2011 fue condenado a nueve años de prisión por concierto para delinquir agravado por recibir apoyos de los jefes paramilitares Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “don Berna”, y Freddy Rendón Herrera, alias “el Alemán”, de acuerdo con una investigación de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares).
Salió libre en 2014, pero al año siguiente la Corte Suprema de Justicia le dictó nuevamente orden de captura por presunto delito de enriquecimiento ilícito con dinero de grupos armados ilegales durante su período como congresista en los años 2002 y 2006. Hoy se encuentra prófugo de la justicia.
En cuanto a Olga, estuvo en la alcaldía con el aval del movimiento Alas Equipo Colombia, orientado por el entonces gobernador de Antioquia Luis Alfredo Ramos Botero, investigado por parapolítica. Ramos también fue senador (2002-2006) y se desempeñó como jefe de debate de Iván Duque en la pasada campaña presidencial.
Después de que iniciaran las investigaciones contra Óscar y él reununciara a su curul, Olga heredó los votos de su hermano y terminó elegida en 2010; así los Suárez Mira mantuvieron su curul en el Senado.
La Corte Suprema de Justicia le abrió a Olga en 2011 una investigación por concierto para delinquir agravado por la financiación de su campaña electoral a la alcaldía de Bello. Sin embargo, la investigación ya fue archivada.
La Alcaldía
Luego del gobierno municipal de Olga, los Suárez Mira mantuvieron el poder en cuerpo ajeno en la Alcaldía de Bello. Primero con Óscar Andrés Pérez, quien se enfrentó con John Jairo Roldán para el periodo 2008-2011.
Roldán, después de su derrota, denunció al movimiento Alas Equipo Colombia por fraude electoral, pero los Suárez Mira rápidamente limaron asperezas con él y pasaron de ser contendores a aliados.
De modo que, en 2010, el clan apoyó a Roldán para obtener una curul en la Cámara de Representantes. Roldán la consiguió, pero no sin haber quedado manchado. Al igual que sus jefes políticos, tiene una investigación en la Corte Suprema de Justicia por presuntas relaciones con el paramilitarismo.
Para la Alcaldía en el periodo 2012-2015 ocurrió lo inesperado: el voto en blanco le ganó a Germán Londoño, el único candidato postulado para esas elecciones quien, obviamente, tenía el aval de los Suárez Mira.
Se repitieron las elecciones con nuevos candidatos pero, sin mayor cambio, ganó Carlos Alirio Muñoz, candidato también del clan.
Finalmente, para este último gobierno le llegó el turno a César, el menor de los Suárez Mira, quien alcanzó la Alcaldía en 2016 y apenas 12 meses después fue capturado en su despacho por cargos de falsedad ideológica en documento público, uso de documento público falso, falso testimonio y fraude procesal. Todo esto por, presuntamente, haber falsificado su título de bachiller.
El 21 de septiembre de 2017, sin embargo, después de haber pasado nueve meses de casa por cárcel, el actual Gobernador de Antioquia, Luis Pérez, le restituyó el cargo y volvió a la Alcaldía.
El Congreso 2018-2022
Para las pasadas elecciones al Congreso, la casa Suárez Mira también quiso hacer presencia en el legislativo a través de tres candidatos: los ya mencionados Olga Suárez y Jhon Jairo Roldán, y Mauricio Parodi Díaz.
De los tres, el único que no reportó ante el Consejo Nacional Electoral donaciones de terceros a su campaña fue Roldán, pero presentó ingresos de recursos propios por 211 millones de pesos.
Y fue el único, además, que consiguió curul en la Cámara de Representantes. Los otros dos tuvieron en total 28 aportantes a sus campañas, pero los votos no les alcanzaron.
Olga Suárez Mira volvió a presentarse al Senado. Cinco financiadores le dieron a su campaña una suma total de 347’876.961 pesos. Cuatro fueron donaciones, realizadas por la Corporación Fondo Económico Municipal del Partido Conservador (por un valor de 20 millones de pesos), el Fondo Nacional Económico del mismo partido (28’500.000) y la cadena RCN (29’987.804), como personas jurídicas.
La única persona natural dentro de las donaciones es Luis Felipe Giraldo Suárez, quien se mueve en actividades tan diversas como publicidad, contabilidad y suministro de refrigerios. A la campaña de Olga Suárez, por ejemplo, hizo un aporte por 119’698.157 pesos, por el concepto de tres bonos “de publicidad radial”.
Anteriormente, había tenido tres contratos con el Estado. Uno de ellos fue con el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, en 2012, para “prestar apoyo en la oficina de contabilidad y presupuesto”. En los otros dos, contratados en 2017, figura como representante legal de la empresa Nutri Fibra S.A., por el concepto de compra de refrigerios para niños en dos instituciones educativas del municipio de Bello, durante la alcaldía de César Suárez Mira.
El aporte restante que se le hizo a la campaña de Olga Suárez provino de Eddy Farley Echeverry López, quien es hoy el gerente de Desarrollo y Progreso de la Alcaldía de Bello. Antes de eso, fue asesor adscrito al despacho del alcalde César Suárez Mira y sus vínculos con la Alcaldía de Bello comenzaron en 2005, cuando la alcaldesa era, precisamente, Olga Suárez Mira. Echeverry López le dio a la candidata un crédito por 149’712.000 pesos.
Ahora bien, el último de los candidatos de los Suárez Mira para esta legislatura fue Mauricio Parodi Díaz, que aparentemente se ha ido alejando del clan paulatinamente, pero a quien incluimos dentro de esta investigación por los vínculos que tuvo en su momento con los hermanos.
Parodi Díaz ya había sido representante en 2006 por el partido Alas Equipo Colombia, como fórmula a la Cámara de Óscar Suárez Mira cuando este se lanzó al Senado. En ese momento la Corte Suprema de Justicia también vinculó a Parodi Díaz dentro del proceso por las relaciones entre dirigentes políticos de todo el país y las desmovilizadas AUC.
Fue, además, presidente de la Liga Antioqueña de Fútbol, asesor del Ministerio del Interior en la Comisión Nacional de Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol de enero a diciembre de 2012, y director del Dapard (Departamento Administrativo para la prevención y atención de desastres de Antioquia) en la gobernación de Luis Pérez.
Gracias a ese último cargo que tuvo, es posible que Parodi Díaz haya conseguido relacionarse con los personajes que después aportarían a su reciente campaña al Congreso. Como también pudiera haberle ayudado su carrera en asuntos deportivos.
Para su campaña a la Cámara recibió contribuciones de 23 aportantes, todos personas naturales, menos uno: la Asociación de Bananeros de Colombia, que le hizo una donación por 15 millones de pesos.
De esos 23, 16 le dieron créditos y siete donaciones (una en especie), que sumaron un valor total de 280’900.000 pesos.
Entre ellos se cuentan su padre, Antonio Mauricio Parodi Acosta, y su hermano, Eduardo Jesús, que le hicieron préstamos por 8’500.000 y 5’000.000 respectivamente.
Asimismo, de los 23, doce han sido contratistas del Estado; todos de corporaciones o entidades del departamento de Antioquia. Incluido, una vez más, su hermano Eduardo Jesús, quien tuvo cuatro contratos con el municipio de Bello entre 2015 y 2017 para asesorías en asuntos de salud.
De los otros once contratistas, cuatro están relacionados con temas deportivos. Hernán Darío Giraldo, que tuvo en 2012 un contrato con el Instituto Departamental de Deportes de Antioquia. José Daniel Castro, quien tuvo dos contratos en 2016 y 2017 con el Instituto Cejeño de la Recreación y el Deporte, del municipio antioqueño de La Ceja, por el concepto de difusión de actividades.
Juan Manuel Gómez, ex representante a la Cámara en 1998-2002, quien ha tenido 44 contratos con el Estado entre 2013 y 2018, la mayoría de ellos como representante legal de la empresa ‘Deportivas Juan Manuel Gómez’, para el suministro de equipamiento deportivo de distintos municipios de Antioquia. Para esta candidatura, Gómez le dio un crédito por 30 millones de pesos a Parodi Díaz.
El último de los aportantes con asuntos deportivos es Rodrigo Humberto Arango, quien figura como representante legal de la Liga de Baloncesto de Antioquia en 15 contratos entre 2012 y 2013. En 2010, Arango le había hecho un aporte a la campaña de Parodi a la Cámara por 5’500.000 de pesos y en esta ocasión le dio un crédito por 20 millones.
Por otro lado, hay cinco aportantes más que tienen contratos con distintos municipios de Antioquia por asuntos de logística y comunicaciones, como la periodista radial Carla Marcela Ramírez, que tiene 38 contratos con el Estado entre 2011 y 2017, en relación con su profesión. Elkin Darío Agudelo, que tuvo 28 contratos entre el mismo periodo de tiempo y por razones de campañas publicitarias.
Javier Alexánder Upegui, quien figura como representante legal de la empresa ‘Eventos Extremo Producciones’ en 21 contratos entre 2012 y 2018, para prestar servicios logísticos.
El comentarista deportivo de Rafagol, Pedro Augusto Veloza Torres, quien tiene 42 contratos por servicios radiales (emisión de pauta, transmisión de campañas publicitarias, entre otros).
Y el actual director Tecnológico de Antioquia, Juan Fernando Ortiz, quien también se desempeñó como Secretario de comunicaciones de Itagüí en 2017, asesor de la Agencia de Desarrollo del mismo municipio entre 2013 y 2016 y gerente de comunicaciones de la Gobernación de Antioquia de Luis Alfredo Ramos, entre 2008 y 2012. Ortiz le hizo una donación en especie de dos millones de pesos a la campaña de Parodi.